En estas fechas es tradición que la mayoría de empresas organicen comidas, cenas y fiestas para sus empleados. Durante el año muchos de ellos no se dejan ver en los famosos “afterworks”, pero en Navidad siempre se hace una excepción.
Os proponemos algunas actividades y dinámicas de grupo con las que romper el hielo. Una oportunidad para mezclar empleados que normalmente no trabajan en los mismos equipos.
Posando en el photocall de Navidad
Es una de las ideas que más triunfan en las fiestas. Sólo hay que elegir una pared y decorarla con motivos navideños. Hay empresas que se dedican a diseñar fondos de paisajes, situaciones festivas y eventos personalizados. Coloca un par de cajas con atrezos divertidos como pelucas de colores, gafas originales, narices, sombreros locos… Los empleados se disfrazarán con estos complementos y posarán ante el photocall elegido. Inmortalizar el momento con una fotografía (las polaroid quedan muy divertidas) y utilizarlas para decorar el árbol de Navidad de la empresa, quedáoslas de recuerdo o adornad vuestras oficinas con ellas.
Resolvamos el Puzzle
Una actividad perfecta para fomentar la cohesión del grupo y el compañerismo. Inicialmente puede parecer un reto sencillo, pero en este puzzle los participantes tendrán que fabricar las piezas y conseguir el material necesario para obtener el dibujo final mientras superan pruebas que dependerán de sus habilidades individuales y grupales. El objetivo es que trabajen en equipo mientras desarrollan su creatividad.
El abeto navideño
Divide a los empleados en equipos y rétales a construir un árbol de Navidad con materiales reciclados. Tendrán un día para llevar al trabajo los envases que crean que van a utilizar y se repartirán las tareas. Los grupos deberán trabajar en diseñar su abeto, definir los materiales que van a utilizar, y coordinarse para construirlo. Nombra un equipo ganador al árbol más bonito u original y pon una pizca de emoción a la competición.
