Quiero ir a la oficina - Cador

Desde que comenzó Cador en 1980 hemos experimentado una evolución espectacular en el diseño e implantación de oficinas.

En aquella época trabajábamos en la compartimentación, despachos cerrados donde la jerarquía era el modelo de trabajo y puestos individuales. En aquel momento no se daba importancia a las personas, lo verdaderamente importante era el asistir a tu puesto de trabajo y desde luego no primaban los valores actuales de libertad y flexibilidad.

Desde hace unos años, el cambio como consecuencia de la creciente digitalización y la tendencia hacia el bienestar, acrecentado por la situación de la COVID-19, hacen que el modelo de oficina haya cambiado radicalmente.

Los nuevos modelos de trabajo, que se caracterizan por la flexibilidad y en los que el trabajador, al igual que el cliente, es el centro de la empresa, requieren de espacios diferentes:

• Espacios abiertos donde se facilita la comunicación, en los que la jerarquía tal y como antes se entendía pierda fuerza y los líderes quieren estar en contacto constante con su equipo.
• Puestos no asignados, para que los empleados podamos movernos según las necesidades del equipo o de nuestra propia comodidad.
• Áreas de concentración para realizar trabajos sin ser molestados.
• Paredes, con vinilos, pizarras, etc, cobran importancia, ya que sirven para recoger ideas y son ideales para las empresas que utilizan metodologías ágiles.
• Espacios sin papel, dado que el compromiso con la sostenibilidad cada vez es más fuerte y, gracias a la digitalización, podemos ir eliminando documentación en papel, que tiene como consecuencia la disminución de armarios, logrando que las oficinas no estén abigarradas.
• Zonas de reunión cómodas, donde los equipos puedan trabajar con las nuevas tecnologías, macropantallas, etc.
• Zonas de ocio, donde compartir con los compañeros otros momentos que no sean de trabajo y que siempre hacen que aumente la pertenencia a la compañía.

Todo esto hace de las oficinas que sean agradables, saludables y hasta divertidas, tanto para el talento junior como para el senior.

Los departamentos de recursos humanos son esenciales en el proceso de cambio de oficina, ya que conocen perfectamente lo que los empleados demandan, y consideran que actualmente estamos ante la oportunidad de presentarles una motivación extra, más allá de su paquete retributivo o de los beneficios sociales que se les facilite.

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Las personas somos seres sociales y, aunque la tecnología nos ha facilitado mucho la vida en general, necesitamos relacionarnos personalmente. Queremos oficinas saludables para nuestra salud física y mental. El modelo híbrido es perfecto para poder encajar nuestra vida personal con la laboral y si una persona se siente bien, cómoda, en un entorno facilitador, es seguro que se incrementará la productividad.

A mí me gusta ir a la oficina, ¿y a ti?

Amparo Álvarez, Directora de RRHH de Cador